Mujer,
me adivino consumiendo
la orilla de tus ansias
con la sed que me provoca
la sensualidad de tu boca
en el limo de mi cuerpo.
Me veo recorriendo con mil besos
la sensibilidad orgiástica de tus dedos
sintiendo tus gemidos perseguir
la atenta angustia de mi miedo;
Aullando con la humedad de tu aliento
asimilar mis íntimos deseos vagabundos;
gozar del silente frenesí del desconcierto
en los vértices erógenos de tu cuerpo
y recobrando la vida en este mundo.
Mujer déjame humedecer
tu piel de mis caricias
y sentirte desvanecer
en la cúspide de tus delicias.
Mujer busca mi placer con tu boca
y cuando sientas mi humanidad
enloquecida apoderarse de tu pelo,
escucharás tu nombre perderse
en un eco... de mórbida vitalidad.
MUJER II
Entre los espejos de mis urgencias
busco a observar tu eternidad
fijo mis ojos al vidrio
y quiebra tu nombre,
mi soledad.
Mujer, mi novia;
amor y madre ideal
mi lágrima es un cometa
en tu sueño universal.
Te busca aquel que te supo bella
te busca aquel que te hizo novia
entre ese cielo de estrellas
y ese vuelo de palomas.
Aquí encerrado en mi alcoba
busco esa foto desnuda.
Negra tu trenza en la luna
fragancias de flores y moras.
En los helechos cobrizos
ocaso brilla mi otoño
abrazado a mis retoños
corazón moreno y mestizo.
Chicos de buena madera
llevan tus besos y risas
mujer yo llevo mi alma
plasmada por tus cenizas.
Vaya mi beso topacio
caminando ya sin prisa
con el viento, con la brisa
caminando vaya despacio
despacio vaya caminando,
con el eco de mi risa.
MUJER MODERNA
Impaciente vas caminando
tus pasos no tocan el suelo
quisieras volar
sin saber donde llegar;
el asunto es
llegar primero.
Mujer moderna
modera tu agitación
no sea cosa que la soledad
te deje abandonada
en la inmensidad
de tu propio sueño.
Con calma
podrías llegar al cielo
quizá al fondo del mar
pero si no sabes
moderar tu vuelo;
darte de cabeza
en el mismísimo
averno.
MUJER DESNUDA
Abrigaré de versos
Tu impúdica desnudez
Que amo tanto.
A ver si severo juez
Pueda apreciar tu encanto
Con ojos de poeta.
MUJER CAUTIVA
Vida, papel y golondrinas
mariposas que vuelan con tu viento
sin embargo si te miro de frente
se mueren mis pensamientos
cuando en un minuto pienso
en lo frustrado
de tu propio vuelo.
Yo lo sé y asi parecen:
oníricos y lindos
tus propios versos
sin embargo con tu velo
estás asesinando de odios
¡caramba! mujer
tu alma y también
tu propio cuerpo.
Pero escucha mujer cautiva
de recuerdos lisonjeros,
no despegan del suelo
las alas de un angel negro;
las estrellas y los cielos
son para golondrinas y versos
de poetas que en el alma
llevan a Dios en el pecho.
Mujer, eres capital de mis países, pavimento de mis veredas y hierba luisa de mis campos.
Eres vaivén de mis columpios tardíos, el sueño principesco de oníricos pensamientos, fuente de agua eres y musa de inspiración constante.
Eres desafío en mi sangre forastera, viento en mi boina de gitano y espejo en el cobre de mis cacerolas.
Eres tañido de campanas y trinos de amanecer, independencia de alboradas, sentimientos de días nuevos y peregrina sin cese de mis encantos.
Eres melodía de mis flautas, huellas de caracol, dulzura comprendida entre la raya del horizonte y la pupila de mis ojos.
Eres techo de mis aguaceros y música húmeda de los helechos.
Eres pájaro y cielo, espacio aún por recorrer.
Eres pluma que provoca los diptongos y mis acentos, mis comas literarias y mis apuntes diarios.
Eres tormenta y beso, temporal y caricia, noche y silencio, día y fiesta, ventanal de mi casa, flor de mi jardín, horno de mi empanada.
Eres regalo eterno, presencia e intimidad, jolgorio de mis intentos.
Eres dulce en mi alacena y libro en mi biblioteca de papel, gaviota en la bitácora de mi navío, pañuelo que me despide en la playa;
Eres impúdico amor, arrullo de otoño de mis tiempos melancólicos.
Eres mujer y también dolor.
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